El bolso es un accesorio muy importante, ya que además de complementar tu imagen, también es un elemento de uso diario, por ese motivo debe reunir dos cualidades básicas: elegancia y funcionalidad.
Para elegir tu bolso ideal, a continuación te apunto los aspectos que debes tener en cuenta:
- Material
Mi recomendación es que sea de piel suave y ligera. Piensa en todo lo que llevamos en el bolso, si el material en sí ya pesa, entonces no será una buena opción.
En ocasiones las pieles son grabadas o combinan diferentes texturas, lo cual ofrece al bolso un aspecto más exclusivo.
- Color
Opta por colores nuevos, pero versátiles, que no limiten las combinaciones con el color de la indumentaria. Una alternativa son los colores neutros atemporales, que puedes llevar tanto en verano como en invierno. También los bolsos estampados ofrecen más facilidad para combinar y además aportar estilo propio.
- Tamaño
La elección del tamaño, irá en función de tu tamaño corporal y del uso que pretendas darle. Si es para ir al trabajo, para salir por la noche, para tu día a día… también ten presente ¿qué deseas llevar?… Y ya sabemos que cuanto más grande es el bolso, más lo llenamos.
Si buscas un bolso que te sirva para todo, entonces lo ideal es el bolso mediano con dos asas y con la opción de correa para colgar.
¿Cómo llevarlo?
Aunque lo más fácil y práctico es llevarlo colgado en bandolera, no es siempre lo más chic, llevarlo en la mano te aportará sin duda máxima elegancia. Por ese motivo es mucho mejor si el bolso en sí tiene estas dos opciones.
- Forma
Cuanto más saco, más informal; cuanto más rígido, más elegante. Las formas que más estilizan la figura son las formas de baúl pequeño o rectángulo. El estilo retro, que evoca un época en el pasado, aportará un toque persona a tu imagen y a la vez te resultará muy práctico.
Recuerda comprobar que el cierre es bien seguro, para evitar posibles robos.